viernes, 20 de noviembre de 2015

Encuadernación holandesa de nervios y puntas

La libreta que ayer terminé ha sido el mayor desastre que he podido hacer en encuadernación. Como primera experiencia ya sé lo que no debo repetir (fallos en el proceso, no dejar de hacer la libreta, ¿eh?).

Ha sido la primera experiencia de lomo redondeado, con cajo y con nervios. Un desastre por dos cuestiones: no equilibré bien las tapas la una con la otra, y las guardas han quedado demasiado cortas. Sí que ha sido la primera experiencia con piel. Veremos a ver si repito. Aunque no sé qué voy a hacer con tantas libretas.





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